La Bòbila
Las fábricas de ladrillos o tejas de barro para la construcción, o tejares (en catalán bòbiles), fueron una de las industrias más antiguas que se instalaron en Gavà. Estaban ubicadas en los terrenos que se extendían entre el cerro del Calamot y las Ferreres hasta la antigua masía de Ca n'Espinós, donde estaba la materia prima: la arcilla y el agua.
Según un documento del Archivo de la Baronía de Eramprunyà ya se construían y se hacían reformas de viviendas en 1757.
La chimenea que hoy se conserva corresponde a la primera tejería moderna construida en Gavà en 1903 por la familia Querol en unos terrenos de la familia Carreras. La fuerte demanda de material de construcción provocó la instalación de más tejares, como la de Pagès o de Josep Gras o la segunda tejería levantada por los Querol.
El proceso de fabricación de ladrillos era un proceso lento y artesanal: desde la extracción de las arcillas, la preparación del barro para convertirlo en ladrillos, el moldeado manual, el secado de las piezas, hasta llegar a la cocción. Esta se hacía en grandes hornos con varias cámaras que permitían la cocción rotativa en cadena.
Actualmente, sólo se conserva la chimenea de la primera fábrica de ladrillos de los Querol, ubicada en el Estadio Municipal de la Bòbila.
Cuando el Ayuntamiento construyó el estadio municipal decidió conservar esta chimenea como elemento identificativo del nuevo equipamiento.